Productos y servicios encarecen de 15 a 35%. Javier Zepeda
Por Rafael Hernández Guízar
Que el incremento del 20 por ciento al salario mínimo que se espera para el próximo 2023 será insuficiente para costear todos los incrementos a productos y servicios, vaticinó ayer Javier Zepeda, consejero empresarial.
Al hacer un balance de la economía en México, adelantó que podría esperarse una economía bastante difícil para los mexicanos puesto que desde el gobierno federal se ha apostado a que las cosas puedan mejorar con el simple hecho de que se ordene el aumento al salario, pero dijo, que en realidad, quienes terminarán por pagar esos incrementos sean los mismos ciudadanos al tener que soportar esas cargas de los empresarios, ya que en caso de que en las empresas no puedan costearlos, los mismos serían trasladados al precio final de productos y servicios.
“Este aumento no necesariamente lo va a absorber el empresario, él a través de sus análisis tiene la responsabilidad de ver si este aumento le sigue generando una rentabilidad, y si no ver la posibilidad de un aumento de sus precios y sus servicios para que pueda ser rentable, y de no ser así, quien va a absorber el pago del salario mínimo será el consumidor, y esto puede representar un aumento a la inflación, porque si yo como empresario tengo que aumentar el costo de mi nómina y no me es rentable, tengo que aumentar los precios, quien paga los platos es el consumidor”.
Pero fue más allá: “Se aprobó un aumento en el salario mínimo que alcanzará los 207.44 pesos en la mayor parte de los estados y en la zona de la frontera estará en los 312 pesos. Si bien este incremento representa un 20 por ciento, la sensación en el día a día es distinta, porque el encarecimiento en los 24 productos de la canasta básica hace que el beneficio económico otorgado a los trabajadores sea afectado. Este aumento puede dividir en dos aspectos importantes, aquellas personas que cotizan en el IMSS serán los únicos beneficiados siempre y cuando realmente ganen esta cantidad, es decir quienes en 2022 ganaban 5 mil pesos mensuales, en 2023 ganarán en promedio 6 mil pesos mensuales. El otro aspecto es que las personas que están cotizando bajo el salario mínimo, pero no están ganando este salario no se van a ver beneficiadas; por ejemplo, aquellos que ganan 10 mil pesos no tienen ningún beneficio porque la inflación golpeó todos los sectores económicos y profesiones. A estas personas no se les ha incrementado el sueldo en los últimos dos años, lo que ha provocado que su nivel de ingresos se vea mermado por el aumento en los productos y servicios”.
Por ende, el 2023 será un año en donde los aumentos que se han dado a los precios y servicios puedan generar una economía sumamente compleja para la ciudadanía.
“La realidad es que todo ha subido, y se siente como cuando hablamos del tema del clima, podemos estar a ciertos grados pero se siente una sensación mucho más fuerte, es similar a la inflación, mes a mes estuvimos llegando a varios picos y desgraciadamente no muy gratos y la sensación es que por más que se cierre el 2022 con una inflación del ocho por ciento promedio, se siente mucho más, los productos y servicios han encarecido desde el 15 hasta el 35 por ciento por mencionar un rango estable, y vamos a arrancar un 2023 con más retos”.
Igualmente, dijo que ahora, los empresarios deberán tener en consideración que al haberse aprobado también las reformas en el tema de las vacaciones para los empleados que irían a 12 días desde el primer año de labores y que se irían incrementado de dos en dos por año cumplido como se marca en la Ley Federal del Trabajo, pueden representar una dificultad para los empleadores que deben prever ya que un empelado podría según su antigüedad, llegar a tener un periodo vacacional en cualquier parte del país de hasta un mes o más.