Y el salario sigue igual, truenan ciudadanos
Por Rafael Hernández Guízar
Ciudadanos protestaron ayer contra el aumento a 25 pesos por el kilo de tortillas aprobado a escala nacional.
Consideran que con este aumento se pone en riesgo su alimentación, pues la economía –según apuntaron– no permitirá que se pague, más pues simplemente no hay dinero suficiente.
“No me la sabía, pero no, no pues ya así no, porque el salario sigue igual, eso no nos lo aumentan. (…) El presidente, pues que tenga un poquito de conciencia, porque no todos vamos a poder comprar, imagínese, ya no vamos a poder comer, porque las familias que somos grandes cómo le vamos a hacer, ya no ajustaba a veces más que para los frijoles y las tortillas, ahora con esto vamos a acabar comiendo puros frijoles, pues nos va a tocar nada más como de a tres tortillas por persona”, dijo Azucena, una de las ciudadanas entrevistadas.
En diversas tortillerías y hasta en las tienditas, el precio que se da a las personas es ya de 25 pesos por kilo, algo que sorprendió a las familias tapatías que con desánimo tuvieron muchos que dejar medio kilo; algunos más incluso no compraron, pues ya no les ajustaba su presupuesto.
“Pues nomás medio kilo me voy a poder llevar porque no me ajustó, a ver cómo le hacemos ahorita en el desayuno, porque ni modo que el de la tienda nos fíe los tres pesos que faltan, digo, no es que cueste 50 centavos más, no, son tres pesos porque estaba en 22, ahora pues, a la tortillería, y llevarnos unos 750 gramos, menos del kilo, y a amarrarse el cinturón, qué más hace uno, porque ya está todo contadito”, resaltó uno de los entrevistados quien pretendía comprar el alimento en una tienda de abarrotes.
Pero en las tienditas no estuvieron muy de acuerdo con los aumentos, pues hay quienes no están comprando.
“Pues sí, pero aún así es la opción más barata, porque el bolillo está caro, y no hay más, ahorita con el mismo dinero va uno comprando menos de todo, lamentable pero pues así está todo, y nomás nos avisaron así, que a partir de hoy (ayer) subía el precio, la vida está muy cara. Le tiene uno que echar más ganas, hoy he vendido menos, la verdad, por el precio”, dijo Ignacio, el propietario de una tiendita.
Y en las mismas tortillerías hay desacuerdos. No les pareció que subiera a 25 pesos el kilo porque la gente simplemente compra menos, y por ende sus ganancias van a la baja.
Para muestra Héctor Hugo Leos, el dueño de una tortillería, quien dijo que no va a subir el precio, pues su ganancia está en la cantidad enorme de tortillas que logra vender al mes, no en lo que representa específicamente cada kilo, o sea al menudeo.
“Yo no lo voy a subir, porque es mucho más lo que uno va a ganar que lo que paga por el maíz, la luz y el gas; mira, si yo hace tres años estaba vendiendo a un precio, nada más le voy a subir un peso, porque uno vende por mucho, son miles de kilos de tortillas los que uno vende y sí se puede evitar que la gente esté golpeada”.
Los precios de la canasta básica han hecho que muchas personas dejen de acceder a diversos alimentos; aunque la tortilla se mantenía como algo esencial, hay quienes ya comen menos porque ya no les alcanza.