“No es justo”, lamentan ciudadanos
Por Rafael Hernández Guízar
Completamente abarrotado lucía el centro de la ciudad de Guadalajara, ciudadanos acudieron al corazón tapatío para hacer sus compras de último momento.
Ayer el centro de Guadalajara fue una opción idónea para la ciudadanía que acudió a este lugar para realizar sus compras de último momento en la víspera de la navidad.
“Ay sí, usted cree, como buenos mexicanos nos esperamos siempre hasta el último, pero me gusta venir este día, el 23 de diciembre a hacer compras porque hay de todo y muchas ofertas, ponen muchas ofertas como para que la gente se lleve las cosas, y mejor todavía mañana (hoy 24 de diciembre) porque como ya es el último día como que se ponen cosas más baratas, seguro porque la gente piensa que se les va a quedar todo, y así se agarran buenas ofertas y buenas cosas”, dijo la señora Magdalena Gómez, una de las entrevistadas.
“Yo pues ya ahora con la familia no puedo venir mañana (hoy 24 de diciembre) porque hay que hacer la cena y también pues preparar todo porque en la noche es la cena, pero sí hago encargos porque como le digo, salen más baratas las cosas, aquí en la calle, porque en las tiendas es lo mismo, bueno hay algunas tiendas que sí ponen ofertas”, agregó.
Una gran cantidad de personas se podía observar por doquier. Cientos y cientos de personas se veían por todos los pasillos y callejones de esta zona de la ciudad.
“Pásele, pásele, es de 80, es de a 80 lo que le guste”, gritaba una comerciante ambulante que ofrecía muñecos de peluche.
Por el Paseo Alcalde también se veía un gran movimiento de personas. Incluso en las cercanías del mercado Libertad, mejor conocido como San Juan de Dios, había ríos y ríos de personas que se observaban desde los puentes peatonales que unen a este edificio con la Plaza Tapatía, a un costado del Hospicio Cabañas.
Aunque a lo largo de varios meses antes se había advertido sobre una crisis económica, ayer pudimos ver una oportunidad de derrama para diversas personas, las compras eran cuantiosas, aunque muchos las hacían a crédito, algo que les dio hasta un año de compromiso para el pago de los productos adquiridos.