Comerciantes Señalan Reuniones Para dar Espacios en Guadalajara

Por Rafael Hernández Guízar

Fotografía relevante a la nota.

La red cobra alrededor de 5 mil pesos como cuota de entrada para poder ingresar a los espacios que ilegalmente ocupan “Crendo y Sonia” en lugares como la Plaza Tapatía, la avenida Chapultepec, en la colonia Americana, el Parque Rojo y la Plazoleta del Templo Expiatorio/Foto: Rafael Hernández Guízar

Supuestos representantes corruptos de comerciantes y “artesanos” preparan una ex­pansión masiva para apode­rarse ilegalmente de las calles de Guadalajara.

Pese a las denuncias públi­cas que se han dado a conocer en Página 24 respecto a la presunta red de corrupción por el ambulantaje, misma que es presuntamente encabezada por el superintendente del Cen­tro Histórico de Guadalajara, Juan Manuel Munguía, y los que han sido señalados de pre­suntamente explotar indíge­nas y mujeres con necesidad, “Crendo y Sonia”, esta últi­ma convocó en recientes días a una gran cantidad de gente para ocupar nuevos espacios en diversos puntos de Guada­lajara, trascendió de acuerdo a una entrevista de comerciantes disidentes del grupo artesanos urbanos.

“Leyendo sobre el abuso a los comerciantes en Chapul­tepec, me recordó que noso­tros pedimos información y nos mandaron con un señor que nos citó en una cafetería, y nos habló de lo que cuesta entrar (a la organización de artesanos urbanos)”, señaló un ciudadano cuya identidad queda en el anonimato por así convenir a sus intereses.

De acuerdo con varios testimonios, al momento se cobran alrededor de cinco mil pesos como cuota de en­trada para poder ingresar a los espacios que ilegalmente ocupan Crendo y Sonia en lu­gares como la Plaza Tapatía, la avenida Chapultepec, en la colonia Americana, el Parque Rojo y recientemente sobre la avenida Enrique Díaz de León en la Plazoleta del Tem­plo Expiatorio.

Esta cifra ha ido aumentan­do con el tiempo de acuerdo a la información proporcio­nada a este reportero: “Hace algunos años (eran) más de dos mil pesos de inicio más cuota permanente, y de otras obligaciones muy pasadas de lanza”.

“Lo comprobamos cuando platicamos con algunos ven­dedores de la avenida Chapul­tepec. Resulta que ese señor (Crendo), da a cada puesto una caja de chácharas, cosas chinas, para que las vendan ahí, y el que menos venda, le castigan sin vender en sábado o domingo, que son los mejo­res días. En pocas palabras, si no vendes sus porquerías, hay sanciones. Le llama apoyo voluntario, pero es a fuerza y bajo castigos”, agregó.

Y siguió: “Tampoco tienes derecho a faltar, y cosas por el estilo”.

De acuerdo con la infor­mación proporcionada a este reportero, la convocatoria fue hecha por la presunta diri­gente de artesanos de nombre “Sonia”, quién lleva a los co­merciantes a platicar directa­mente y de frente con su cóm­plice para explicar las reglas que se siguen dentro de su organización en las cuales de­ben de pagar semana a semana una renta por un espacio que es público, así como el pago de una bodega, una cuota fija para una persona que entrega y recoge las mercancías, una supuesta medicina para evitar enfermarse de coronavirus, además de recolectas obliga­torias con cuotas de hasta mil pesos supuestamente para do­nar caritativamente a los más necesitados. Dinero del que nunca se da un balance finan­ciero a los integrantes de la organización y tampoco a la Secretaría de Hacienda y Cré­dito Público, de acuerdo con la información proporcionada a este diario.

Pero de acuerdo con los comerciantes molestos, hay otro tipo de gastos extraordi­narios y recurrentes, pues se­gún confirmaron en entrevis­ta, “Sonia” les hace pagar su comida cuando está presente en el área, así como cualquier cosa que ella requiera en ese momento, como bebidas, en­tre otras cosas.

La convocatoria que reali­za la señalada y su cómplice, sería para ocupar nuevos espa­cios en la Plazoleta del Tem­plo Expiatorio, así como para tener mayor presencia durante toda la semana en el Parque Rojo y según han especulado, sobre las banquetas de calles como López Cotilla y los an­dadores peatonales como el Callejón del Diablo, Antonio Molina y Ángela Peralta, estos últimos comprendidos en un polígono que va de la avenida Juárez a la calle Morelos y de la calzada Independencia has­ta la calle Ramón Corona en el centro de la ciudad.

Dichos espacios se han ofrecido según trascendió, con una cuota de entrada de cinco mil pesos, así como el pago semanal de mil pesos por la renta forzosa de las es­tructuras color verde con las que se venden diversos tipos de productos en los lugares mencionados párrafos ante­riores.