Policías de Zapopan Actuaron por Órdenes de Criminales, Asegura

Jaime Aldrete Asegura que él y su Hijo Fueron Víctimas de los Oficiales; Juez Municipal los Dejó Libres por Falta de Elementos

Por Rafael Hernández Guízar

Fotografía relevante a la nota.

El activista ambiental Jaime Aldrete Medina asegura que, por órdenes de un grupo de motociclistas que se identificaron como parte de una banda de la delincuencia organizada, los arrestaron y los subieron a la patrulla/Foto: Archivo Página 24

El activista ambiental Jaime Aldrete Medina asegura que él y su hijo fueron víctimas de una detención ilegal por parte de la Policía municipal de Zapopan.

El pasado viernes por la tarde, en la entrada del fraccionamiento Valle de los Molinos, en Zapopan, tras una discusión entre Aldrete Medica y unos motociclistas, una patrulla perteneciente al cuartel de la policía municipal de Zapopan que tiene su sede en este fraccionamiento, cuando fue detenida por el activista y su hijo para pedir auxilio, los empezaron a amedrentar y les inventaron cargos, pero fue más allá la situación ya que, a decir de Jaime Aldrete, por órdenes de los motociclistas que se identificaron como parte de una banda de la delincuencia organizada, los arrestaron y los subieron a la patrulla.

Lo anterior fue constatado por este reportero quien se encontraba en la línea telefónica escuchando la manera en la que eran amedrentados por los policías municipales quienes les dejaron en claro que la revisión que les estaban haciendo tenía como fin encontrar algo que los incriminara.

Cuando estos descubrieron que este reportero estaba en la línea telefónica colgaron el teléfono y lo apagaron.

Acto seguido fueron llevados al juzgado municipal de Zapopan y se les acusaba de ingerir bebidas embriagantes en la vía pública y alterar el orden social.

Los policías municipales, de acuerdo a lo señalado por el agraviado, rompieron el celular de su hijo cuando descubrieron que estaban siendo monitoreados y grabados durante la detención ilegal, además de practicar tortura psicológica al decirles que ya “se los había llevado la chingada” (sic).

Durante varias horas permanecieron incomunicados y nunca se les leyeron sus derechos de acuerdo al protocolo de actuación. Jaime Aldrete destacó que fue víctima de vejaciones por parte de la comisaría general de seguridad pública del municipio de Zapopan, toda vez que su derecho a solicitar un defensor legal no le fue concedido sino hasta casi seis horas después de haber sido arrestado.

Así mismo, resaltó que el único que fue consciente del Estado de derecho y se apegó a la legalidad fue el juez municipal, quien le dejó libre junto con su hijo por falta de elementos, y sólo les dio una amonestación verbal.

Sin embargo, de acuerdo con Jaime Aldrete, el daño recibido fue cuantioso debido al miedo que produce el actuar de los policías municipales quienes, según dijo, mostraron estar a merced de un grupo de civiles que se identificaron como delincuentes.

Debido a esto, ya fue interpuesta una queja en la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ), así como una denuncia ante el área de Visitaduría de la Fiscalía General del Estado.