Más Desordenado que Nunca

Ante la Menor Presencia de Alguna Autoridad Levantan su Mercancía y se Mueven a Otro Lugar a Seguir con su Actividad

Por Elizabeth Ríos Chavarría

Fotografía relevante a la nota.

Comerciantes fijos y transeúntes mencionan que policías e inspectores no ponen orden, a pesar de que la presencia de ambulantes es cada vez más notoria/Fotos: Francisco Tapia

Si bien en más de una ocasión autoridades han rea­lizado operativos para inhibir a quienes no cuentan con un permiso para vender en el centro histórico de Guada­lajara, el famoso comercio golondrino persiste, aún más desordenado que nunca.

Aparatos o accesorios di­versos para celulares, jugue­tes, bisutería y hasta paraguas (por la temporada) son algu­nos de los múltiples artícu­los que se ven a lo largo del primer cuadro de la ciudad, de la mano de comerciantes informales que ante la menor presencia de alguna autoridad levantan su mercancía y se mueven a otro lugar a seguir con su actividad.

Sin embargo, no en todos los casos es la misma situa­ción, pues mismos comercian­tes fijos y transeúntes mencio­nan que policías o inspectores no ponen orden en muchas de las veces, a pesar de que la presencia de ambulantes es cada vez más notoria.

“Generan mucho tumulto en algunos lugares, sobre todo por la tarde, es decir, si de por sí ya hay mucha gente los fi­nes de semana, en las tardes se pone caótico, en especial estas calles que salen para el Mercado Corona por tantos (ambulantes) que se juntan”, refirió Abel Villagómez.

“Entiendo que todos tie­nen derecho a trabajar pero luego ves que venden todo tipo de mercancía o hasta generan puntos de inseguri­dad porque muchos de ellos se ponen bravos si les dicen algo, además no puedes decir nada porque hasta los policías los dejan y no hacen nada. No pagan permisos como no­sotros y no están regulados como nosotros, y así hacen y deshacen como si nada”, consideró una locataria del centro.

“El ayuntamiento dice que deben estar regulados, pero los dejan hacer lo que quieren y no está mal si los dejan traba­jar, creo que el problema es la forma en la que actúan ya que cuando menos lo esperan hacen sus operativos y se van contra todos de una forma fea, y luego pasa mucho tiempo y se genera el caos porque llegan muchos ambulantes y no hay orden. De­berían de ser firmes y sí permitir trabajar pero con orden porque tampoco son las formas”, aña­dió Evelyn Santana.

A decir de transeúntes, al menos en la zona de la Calza­da Independencia los comer­ciantes informales que se po­nen en las banquetas suscitan serios problemas de movili­dad, así como de seguridad. En cuanto a la zona centro, otros más manifestaron su inconformidad por el caos que generan en las banquetas de Los Dos Templos, ya que con tantas rutas en la zona, se vuelve peligroso circular.

Santa Mónica, Ocampo, Morelos, Pedro Moreno, Juá­rez, Colón, algunas partes de Alcalde, la zona de Los Dos Templos y a lo largo de la Calzada Independencia (a la altura de Obregón o San Juan de Dios, hasta Revolución), son algunas de las zonas pre­dilectas en las que ambulan­tes o comerciantes golondri­nos se postran a diario para ofertar su mercancía diversa