Pese a Patrullaje

Por Rafael Hernández Guízar

Por increíble que parezca, el Paseo Alcalde sigue siendo una zona de mucha inseguri­dad.

Aunque constantemen­te pasa la policía municipal, tanto en patrullas como en bicicletas y hasta a pie, se cometen robos constantes en esta zona y hay agresiones por parte de vándalos y dro­gadictos, sobre todo en los al­rededores del templo de San Francisco, una zona conoci­da coloquialmente como los “Dos Templos”, en los cruces de la avenida Fray Antonio Alcalde y la calle Prisciliano Sánchez.

“Sí es cierto, sí hay mucho robo por aquí, y es raro porque pasa mucho la patrulla, luego aquí enfrente está la policía, el edificio de la policía (Esta­tal), pero de todos modos se cometen robos, hay mucho vago que anda por aquí”, dijo don Rafael García, un bolero que trabaja en la zona.

Desde hace varias déca­das esta persona que se de­dica a lustrar calzado en este punto, dijo en entrevista que ni siquiera la presencia constante de la policía ame­drenta a los rateros para que estos dejen de cometer sus fechorías.

Es la Secretaría de Seguri­dad del Gobierno del Estado la que se encuentra a solo unas calles del señalado punto, en los cruces de la calle Libertad y el Paseo Fray Antonio Al­calde.

En este sitio hay por lo menos unas 20 patrullas de la policía estatal, cámaras de videovigilancia, y decenas y decenas de policías estatales y municipales.

Nada de lo anterior ha he­cho que la paz prive en este sitio, pues también una gran cantidad de indigentes ha ro­bado la tranquilidad a comer­ciantes, vecinos, y turistas en general.

Por ello se hizo un llama­do especial al presidente mu­nicipal Pablo Lemus Navarro, pero también al gobernador Enrique Alfaro, y es que resul­ta increíble que pese al gran despliegue de fuerza pública se sigan cometiendo delitos incluso a plena luz de día, y peor aún, que los mismos queden en la impunidad al no haber quien ponga orden.