Admitió que Deja a Próximos Gobiernos la Sustitución de Tuberías e Infraestructura

Usuarios Reportan Agua “Chocolatosa o Turbia” que Llega a sus Hogares. Al Gobernador le Molesta y Niega que el Agua que Llega a la Ciudad sea de Mala Calidad y que el Siapa esté Rebasado

Por Elizabeth Ríos Chavarría

Fotografía relevante a la nota.

“Lo que tenemos es muchos sistemas de conducción que ya han cumplido su vida útil y que tienen que ser cambiados, y es una agenda que recae fundamentalmente en el Siapa, pero que requiere de una planeación con gobiernos municipales del área metropolitana y en la que se tiene que seguir trabajando”, se lavó las manos Enrique Alfaro/ Foto: Francisco Tapia

Ante las quejas de ciuda­danos de decenas de colonias por la mala calidad del agua que reciben, el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramí­rez, aseguró que se trata solo de tuberías viejas y no de un problema de contaminación en la fuente; el Siapa no está rebasado, expresó.

Cuestionado sobre el tema tras un evento de reforesta­ción en Tapalpa, el mandata­rio estatal negó que el agua que está llegando a la ciudad sea de mala calidad, a pesar de que en redes sociales jalis­cienses han dado cuenta del agua chocolatosa o turbia que les llega a sus hogares.

“El tema de la calidad del agua ha estado más bien aso­ciado al tema de tuberías vie­jas, no es un problema de la fuente de abasto, no tenemos agua de mala calidad llegan­do a Guadalajara. Lo que te­nemos es muchos sistemas de conducción que ya han cum­plido su vida útil y que tienen que ser cambiados, y es una agenda que recae fundamen­talmente en el Siapa pero que requiere de una planeación con gobiernos municipales del área metropolitana y en la que se tiene que seguir traba­jando”.

Refirió que el trabajo en la materia no se ha detenido y aunque ha habido severas críticas al Sistema Intermuni­cipal de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado (Sia­pa), enfatizó que el organismo no se ha visto rebasado pues más bien se trata de un pro­blema de grandes dimensio­nes que están atendiendo con todos los recursos que tienen.

“No hay agua sucia en tér­minos de que haya una fuente que esté contaminada. Lo que hay y lo que puede haber es que en algún momento alguna tubería tenga ya muchos años de uso, que esté vieja, que des­prenda partículas y que esa se tenga que cambiar. Entonces, lo que es importante es que la gente entienda que no hay un problema de agua sucia que esté llegando a Guadalajara. Lo que sí puede haber son tu­berías que necesiten un cam­bio y en eso vamos a seguir trabajando”, reiteró.

Con respecto al tema del abasto del agua añadió que el Siapa ha crecido y que tienen un programa de desarrollo cuyo objetivo es que a la ciu­dad no le falte agua nunca, por lo que a finales de año llega­rán a tal meta con la termina­ción de las obras en torno a la presa El Zapotillo y el sistema de acueductos que van a unir la red El Salto y Calderón.

Aunque admitió que será a los siguientes gobiernos a los que les tocará también el tema de la sustitución de tuberías y demás infraestructura, añadió que a él le tocará dejar resuelto el abasto de agua en la ciudad por los siguientes 50 años, así como el reúso del agua para temas industriales.

“A mí me va a dejar re­suelto el abasto para 50 años de la ciudad y con eso sien­to que cumplí. Lo que no se pudo hacer en 40 años en Guadalajara. Nadie pudo re­solver ese tema, se pasó del crédito japonés a la presa Ar­cediano; nunca se hizo nada y finalmente encontramos una salida que está por terminarse este mismo año”.