“Es una Alternativa que Permite una Reinserción Adecuada”: Diputada

Cada año más de 8 Millones de Personas Mueren por Consumo de Tabaco, de las Cuales 7 Millones se Relacionan con el Consumo Directo y el Restante por Exposición

Por Elizabeth Ríos Chavarría

Con la finalidad de generar mayor conciencia en la ciuda­danía, la diputada de Morena, Leticia Pérez Rodríguez, pre­sentó una iniciativa de refor­ma para que quien rompa la Ley de protección contra la exposición al humo de tabaco en la entidad pueda conmutar sanciones con trabajo comu­nitario.

La diputada recordó que en mencionada ley se delimi­tan una serie de sanciones en un afán de garantizar el dere­cho a la salud de la ciudada­nía, sin embargo, es necesario implementar los mecanismos de socialización en la misma y es por ello que su propuesta contempla reformas al artícu­lo 35 de esta legislación.

Detalló que en la actuali­dad todas las sanciones por quebrantar esta ley podrán conmutarse total o parcial­mente siempre y cuando el infractor acuda a clínicas contra el tabaquismo o si­milares que determine la autoridad competente, no obstante, ella propone que también se agregue la posi­bilidad de hacer trabajo co­munitario.

“El trabajo comunitario como mecanismo de repara­ción del daño es una alterna­tiva que permite una reinser­ción adecuada y beneficia de manera adecuada a la socie­dad. En síntesis, la iniciati­va busca incorporar a la ley el trabajo comunitario como mecanismo expreso de con­mutación de pena”, enfatizó la morenista.

Tras recordar cómo la Constitución Política esta­blece, en su artículo 4, el de­recho de todas las personas a la protección de su salud, no dejó de mencionar cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que señalan, al 2022, que el tabaco mata a la mitad de las personas que lo consumen. Esto da como resultado, añadió, que cada año más de 8 millones de personas mueran por esta causa, de las cuales 7 millo­nes se relacionan con el con­sumo directo y el restante por exposición.

“Más del 80 por ciento de los mil 300 millones de con­sumidores de tabaco que hay en el mundo viven en países de ingresos medianos a bajos. En 2020 el 22.3 por ciento de la población mundial consu­mía tabaco; concretamente el 36.7 de todos los hombres y el 7.8 por ciento de las muje­res en el mundo”.

Mencionó que para ha­cer frente a la epidemia del tabaquismo los estados que integran la OMS adoptaron, en 2003, el Convenio Marco para el control del Tabaco, el cual ha sido ratificado en al menos 182 países, por lo que se hacen necesarias más medidas que abonen a estas acciones.

“El tabaco es perjudicial en todas sus modalidades y no existe un nivel seguro de exposición al tabaco. Fumar cigarrillos es la forma de consumir tabaco más exten­dida en el mundo. El taba­quismo aumenta la pobreza porque los hogares gastan en tabaco el dinero que po­drían dedicar a necesidades básicas como la alimenta­ción o la vivienda. El consu­mo de tabaco tiene además un costo económico enorme en el que se incluyen los elevados costos sanitarios de tratar las enfermedades que causa y las pérdidas de capital humano debi­do a su morbimortalidad”.