En la Zona de La Minerva

Por Elizabeth Ríos Chavarría

Fotografía relevante a la nota.

Calles cerradas, tráfico desmedido y rutas del transporte público desviadas, generaron molestia en la ciudadanía que no se enteró de los cambios momentáneos/Foto: Elizabeth Ríos Chavarría

Un rato de caos se vivió en los alrededores de la glo­rieta de La Minerva el sábado pasado tras la marcha por la diversidad sexual que se lle­vó a cabo por la tarde; calles cerradas, tráfico desmedido y rutas del transporte público desviadas, generaron moles­tia en la ciudadanía que no se enteró de los cambios mo­mentáneos.

Aunque las autoridades trataron de no cerrar por tanto tiempo las vialidades en tor­no a donde partió la Marcha del Orgullo de Guadalajara, lo cierto es que ni ello previ­no la confusión en más de al­gún tapatío que no se dio por enterado de la movilización, orillándolo a caminar más de la cuenta en aras de poder to­mar su camión.

“No fue tanto el cierre sino que no supimos por dón­de se iba a estar regresando el camión. Nosotros ahí ve­nimos bien confiados porque nos subimos aquí bien cerca y cuando vimos que se desvió nos tuvimos que bajar porque sentíamos que nos perdimos. Ya después nos dimos cuenta que había marcha y pues aho­ra a buscar de nuevo la ruta para retomar camino”, platicó Lourdes Palacios que se bajó en la zona de Chapultepec.

“Había visto algo en inter­net (sobre el desvío de rutas) pero como se vio bien enre­doso y de todas formas yo ya sé cómo se pone la zona, mejor traté de venirme una hora antes para ganarle a los cierres (…), por aquí trabajo y quise evitarme la camina­da con tanto sol y calor que hay, aunque sí debieron (las autoridades) informar mejor por dónde iban a pasar los ca­miones porque yo sí vi a gente medio perdida”, agregó por su parte Jazmín Figueroa.

La marcha estaba progra­mada a salir a partir de las dos de la tarde por La Minerva a fin de seguir la ruta de aveni­da López Mateos, Hidalgo y Chapultepec para finalmente concluir en la glorieta Niños Héroes, sin embargo, el con­tingente salió más de una hora tarde lo que prolongó el mo­mento de los cierres viales. Cuando estos se registraron, algunas paradas de camión lucieron con gente que toda­vía no se enteraba, en tanto que otros ciudadanos optaron por elegir medios de transpor­te alternos.

“La ruta 183 no ha pasado en un buen rato y traemos la preguntadera y el caso es que no damos, los policías nos di­jeron más o menos por dónde, pero mejor nos vamos a ir en taxi porque ya es tarde y es­perar todavía es perder más tiempo. Mal (la organiza­ción), cada que hay manifes­tación siempre es lo mismo”, lamentó Horacio Meza.

Aunque el recorrido del contingente no duró mucho, ya que tampoco hubo dema­siada asistencia, hasta poco antes de las cinco de la tar­de se empezaron a abrir las vialidades principales, por lo que la movilidad en zonas como Hidalgo se reestable­ció rápido.