Faltaron insumos y tratamientos: Especialistas
El número de casos de personas con sífilis incrementó hasta diez veces en los últimos tres años debido al poco acceso a los medicamentos y servicios médicos durante la crisis sanitaria por el COVID-19, afirmó la doctora América Aimé Corona Gutiérrez, coordinadora del Módulo de Ginecología y Obstetricia del Congreso Internacional Avances en Medicina (CIAM 2023).
En conferencia de prensa para dar a conocer las actividades del módulo, dijo que antes de 2020 el Hospital Civil de Guadalajara (HCG) atendía entre uno y dos casos de mujeres con sífilis, muchas de ellas embarazadas, y ahora conocen hasta diez casos en un mes.
Explicó que el confinamiento hace tres años propició que las personas no tuvieran acceso a muchos medicamentos; no podían acudir a consulta, además de que hubo escasez de algunas pruebas diagnósticas, que son parte del protocolo de atención durante el embarazo.
“En salud, como en muchas áreas, faltaron los insumos, los tratamientos, el que la paciente pudiera acudir a atenderse. Durante mucho tiempo hicimos consultas virtuales y todos estos factores fueron un desencadenante de que los contagios continuaran y se fuera extendiendo la prevalencia de la enfermedad; ahora lo que estamos viendo es que tenemos alrededor de diez veces más casos de sífilis”, aseguró.
La sífilis es una enfermedad de transmisión sexual provocada por una bacteria que infecta el área genital de hombres y mujeres; es curable y es tratada por lo general con penicilina. De no recibir un tratamiento adecuado las personas presentarán complicaciones en su salud como daños en el cerebro, los nervios, los ojos o el corazón; en el caso de las mujeres embarazadas pueden transmitir la enfermedad al bebé, causando daños a todos sus órganos.
René Osvaldo Pérez Ramírez, coordinador del Módulo de Pediatría del CIAM 2023, recordó que los bebés que son contagiados de sífilis durante el embarazo tendrán afección sistémica, es decir, presentarán complicaciones en todos sus órganos y sistemas como el nervioso, que provoca secuelas en la movilidad, la capacidad de respirar, comer o aprender.
“Los bebés que tienen sífilis congénita se tienen que separar de sus mamás, recibir medicamentos vía vascular (por catéter) y quedarse hospitalizados por periodos prolongados para recibir el tratamiento; además de los riesgos que tiene la enfermedad, limita el apego entre la mamá y el bebé, lo que también es un golpe serio para la lactancia materna”, señaló.
Dijo que lo más importante es la prevención tanto en mujeres y hombres sexualmente activos, como en las embarazadas, quienes deberán realizarse una prueba para detectar esta enfermedad y, en caso de salir positiva, recibir el tratamiento con antibiótico, al igual que su pareja sexual para evitar un recontagio