Critican derechohabientes inconformes:

Por Rafael Hernández Guízar

Fotografía relevante a la nota.

De acuerdo con derechohabientes que acuden a la clínica 46 del IMSS, acudir para una valoración para ser intervenido es muy complicado, ya que el sistema para sacar citas está sobresaturado: además, denunciaron que hay escasez de medicinas/Foto: Francisco Tapia

Desabasto de medicamen­tos se reporta en la clínica 46 del IMSS en Guadalajara, asimismo, hay molestia por la mala atención en los servicios de especialidades.

A decir ciudadanos entre­vistados, acudir para que se haga una valoración para ser intervenido es muy compli­cado, ya que se debe de sacar una cita y está sobresaturado el sistema.

“Pues yo traigo un proble­ma de hernia, ya van tres ve­ces que me dicen que me van a operar y nada, me cambian la cita y luego me dicen que hasta dentro de no sé cuánto, ya no puedo seguir así porque tengo miedo de que me vaya a estallar porque es hernia umbilical y no puedo ni ma­nejar y de eso me mantengo, soy chofer y ya en la empresa no me quieren dar chance, me van a terminar corriendo”, dijo muy molesto Roberto, uno de los entrevistados.

“Yo lo que digo es que de­berían de darle prioridad a los que tenemos en serio una ne­cesidad y luego, nunca tienen chance, que está saturado y no sé cuánto, no es justo, uno paga porque lo atiendan, no es que le hagan a uno el fa­vor, de lo que nos descuentan cada quincena es que se paga el sueldo de los doctores y para que no hagan su chamba, no es justo verdad”, agregó el molesto ciudadano.

Asimismo, la falta de me­dicinas es constante. Marise­la, una señora con hiperten­sión y diabetes, dijo a este reportero que en dos ocasio­nes le han tenido que suspen­der los tratamientos pues no hay medicina suficiente, ella ha tenido que comprar las medicinas y la misma insu­lina por fuera del IMSS, lo que le supone gastos que no puede costear.

“Apenas alcanza la pen­sión para medio comer, y todavía le echa uno que tie­ne que comprar la medicina, pues no. Gracias a Dios que me dan la pensión de lo de los viejitos de López Obrador, porque si no fuera por eso pues se queda uno sin nada, yo ni recibo ayuda de mis hi­jos, ya se olvidaron de su ma­dre, y mi esposo se murió, así que me quedé sola y sin nadie que me tienda la mano, enton­ces pues por favor, que ojalá no nos hagan eso, que haya medicinas”, finalizó.