Lamentan ciudadanos ante aumentos en la canasta básica
Ni trabajando los dos cónyuges alcanza para cubrir lo básico
Por Rafael Hernández Guízar
Jaliscienses lamentaron que la crisis económica y los aumentos en los precios de la canasta básica los está “matando de hambre”.
Y es que productos tan indispensables para la alimentación como el huevo que está en 50 pesos el kilo, y las tortillas que se vende a partir de 24 pesos el kilo, hace que muchas de las personas que ganan apenas arriba del salario mínimo puedan escasamente alcanzar a alimentarse ellos y sus familias.
“Pues que nos estamos muriendo de hambre, si apenas alcanza uno a comer, por decir, al día, mínimo se gasta uno entre 200 y 300 pesos para comprar la comida, y eso no comiendo mucho, apenas algo tranquilo, yo por ejemplo, gano mil 700 a la semana, y con eso pues ya no alcanza, gracias a Dios mi señora vende cosas y ahí más o menos la llevamos, porque si fuera nomás con lo mío no la hacemos”, dijo uno de los entrevistados.
“Ella tuvo que ponerse a sacar dinero también porque ya con lo mío no nos ajustaba, y ahora pues es eso lo que nos ayudó, más o menos andamos ganando lo mismo y apenas logramos sacar los gastos porque hay que pagar renta y comida, y nomás porque así que uno diga lujos, no, ya no se puede a veces uno ni dar un gusto”, agregó.
Y es que para muchos, comprar carne es casi un lujo, lujo que pocas veces al mes se pueden dar.
“Una vez o dos a la semana, y no más, porque no ajusta, está carísima la carne, está a 200 pesos el kilo, de bistec, y ya así que chorizo o algunas otras cosas pues también, cuando se puede, pero casi pura verdura y soya y esas cosas, un poco de jamón y salchicha, pero no es como antes que uno podía comer carne diario”.
La problemática afecta a un gran sector de la población jalisciense, y es en la ciudad donde los problemas se agudizan por el encarecimiento de los precios de los alimentos, lo cual logran sortear la mayoría acudiendo a los tianguis, mercados y centrales de abasto, donde se puede encontrar un poco por debajo de lo que cuesta comprar en los supermercados.