No impone su autoridad, acusan
Por Rafael Hernández Guízar
“A mí me vale madre, con perdón de usted, este juzgado es un desmadre”, así contestó el juez décimo de lo familiar a una mujer en días pasados tras un reclamo de esta por la lentitud en su caso.
Una mujer que desde hace tres años no ha podido ver a su hija por la negativa de su ex pareja, acudió la semana pasada al juzgado décimo de lo familiar con sede en Ciudad Judicial, en Zapopan, para solicitar al juez que imponga su autoridad ya que el padre de su menor hija se ha negado a llevarla a un centro de convivencia, la respuesta del juzgador la dejó sin palabras pues le dijo a esta que estaba harto de los reclamos ciudadanos.
“Mire, si usted quiere poner una queja o un amparo está bien, yo la próxima semana me voy a mi casa ya, porque con todo respeto, este juzgado es un desmadre”, relató la desesperada mujer que vio con desesperación cómo a pesar de que la razón jurídica le asiste, el juez decidió no ayudarla en lo que es en realidad su responsabilidad, velar por los derechos de la menor en cuestión.
“Es que yo le dije al juez que por qué no está actuando en mi caso, que ya en muchas ocasiones se le ha pedido que use los medios de apremio –maneras de hacer que cumpla la ley– para que el papá de mi hija la lleve al centro de convivencia, y me dijo que porque no lo he pedido, y en el expediente están mis peticiones, las que ha hecho mi abogado, pero de hecho, vi incluso que no están todos los escritos, yo le mostré el último que habíamos metido desde el día 6 de enero y no ha respondido, y la ley le obliga a que den respuesta en tres días, pero me dijo que no sabía dónde estaba el escrito, o sea que a lo mejor hasta se les perdió, y pues me molestó porque yo quiero ver a mi hija, mi hija está creciendo sin mí, y a él parece que no le importa”, indicó la mujer en entrevista con Página 24.
Este es sólo uno de los casos que han avanzado lentamente en dicho juzgado, y hay que decir, que está a solo días de que se desarrolle una audiencia de escucha de menor, y por parte del juzgado ni siquiera se ha contestado la petición para que sea un especialista en psicología el que observe y analice a la niña, a la que por cierto, se le ha negado la oportunidad de que conviva con su madre, como es su derecho según la misma ley en Jalisco.