Las personas se debaten entre comer o pagar servicios
Por Rafael Hernández Guízar
Cada vez son más ciudadanos los que se ven imposibilitados para poder alimentarse y cumplir con las necesidades de sus hogares.
Página 24 realizó un sondeo con ciudadanos entrevistados en el centro de Guadalajara donde trascendió la desesperación de muchos ante el incremento en los productos de la canasta básica y de servicios como el transporte, el agua potable y la energía eléctrica.
“Pues yo la verdad que estoy muy preocupado, me siento desesperado porque ya no sé ni qué hacer, ya no ajusta, no ajusta para comer, para pagar renta, para pagar el agua y la luz, chingado (sic) ni para subirse al camión a veces porque son 10 pesos, y si necesitas tomar cinco camiones o más, son 50, 60 pesos o más, y de dónde”, dijo muy desconcertado Saúl Hernández, uno de los entrevistados.
“Yo tengo dos hijos y nada más yo trabajo, mi señora pues está al pendiente de los hijos, pero ya no nos está ajustando, ya tengo dos trabajos y la verdad que entre todo lo que se gasta pues apenas la hace uno, y a regañadientes, ya no sé ni qué hacer, en la noche trabajo en una empresa maquiladora, y en la tarde le pego a un taxi, pero entre las dos cosas no me ajusta, no sé ni cómo le hacen los demás, pero hace años esto no estaba así”, indicó.
Mayra Raigoza, otra de las entrevistadas, dijo que se vio en la necesidad de empezar a trabajar pues con el salario de su esposo ya no era suficiente: “A nosotros nos subieron la renta, y pues eso nos mató, por eso me tuve que meter a trabajar, pero es la misma cosa porque hay que pagar guardería, y es más gasto, o sea que no es tanto el beneficio, sí hay ayuda porque al menos puede uno sacar los gastos, pero quedamos tablas, no hay posibilidad de ahorro ni nada”.
Y es que a decir de varios de los ciudadanos entrevistados, de no haber una estrategia del gobierno federal para contener el alza de precios, podría llegarse a un estallido social ante el sentimiento que queda entre la ciudadanía de desesperación, de indefensión ante la crisis económica que azota el territorio nacional.
“…ya tengo dos trabajos y la verdad que entre todo lo que se gasta pues apenas la hace uno, y a regañadientes, ya no sé ni qué hacer, en la noche trabajo en una empresa maquiladora, y en la tarde le pego a un taxi, pero entre las dos cosas no me ajusta…”
Saúl Hernández, padre de familia