Que mejor se lleve de Matatlán los desechos de GDL, revira

Por Elizabeth Ríos Chavarría

Tras agradecer el ofreci­miento que hizo el alcalde de Guadalajara, Pablo Lemus, sobre ayudarles con el tema de la recolección de la basu­ra, el presidente municipal de Tonalá, Sergio Chávez, llamó mejor al emecista a llevarse los desechos que se acumula­ron de la Perla Tapatía en el basurero de Matatlán.

Desde hace dos semanas Tonalá ha tenido problemas con la recolección de basura debido a que Caabsa Eagle –la concesionaria encargada de es­tas labores– dejó de prestar el servicio por no tener un lugar en donde depositar los residuos, tras la clausura que hicieron au­toridades federales del basurero irregular en Matatlán.

Esto ha orillado a que el gobierno de Tonalá se haga cargo de la recolección y como no se ha dado abasto con ello, ya que en las calles del municipio hay basura por doquier, el alcalde le pidió mejor a su homólogo de Gua­dalajara a retirar las 120 mil toneladas de basura de tapa­tíos que la empresa dejó en este basurero.

“Yo le agradezco al alcal­de de Guadalajara el apoyo, gracias, pero yo le agradeceré más que se lleven la basura de los tapatíos, que son más de 120 mil toneladas que se almacenaron y que junto con Caabsa que se lleven ese ba­surero, que es una forma ile­gal. Bienvenido el apoyo, pero más que nos preocupemos por Matatlán y Los Laureles que está ahí almacenado el tema de la basura, que es un tema del que no nos vamos a que­dar callados”.

Recordó que las conse­cuencias del mal funciona­miento de estos dos vertede­ros son graves, ante los daños ambientales que se han ge­nerado en la zona, por lo que no dejó de mencionar que la basura es uno de las grandes asignaturas pendientes pero de todos los alcaldes metro­politanos, por cómo durante años se sirvieron de estos dos basureros para depositar los residuos de toda la ciudad.

Por otro lado, y luego de que en redes sociales se diera a conocer que seguía entrando basura a Matatlán, el alcalde aseguró que no ha entrado ni un solo kilo desde hace dos semanas que la Profepa clau­surara Matatlán.