“De delincuentes no nos bajan”, critican actitud de policías viales

Por Rafael Hernández Guízar

Motociclistas se dijeron muy molestos de los opera­tivos que se desarrollan en Guadalajara contra quienes van a bordo de estos vehícu­los; exigieron que no haya discriminación, pues a todos los están encasillando como “delincuentes”.

Hartos de que se les lla­me “motorratones”, motoci­clistas en general indicaron que es aberrante que policías y personal del ayuntamiento en general estén propiciando y participando en actos de molestia, de discriminación a quienes viajan acompañados a bordo de una motocicleta, por considerarlos peligrosos: “Que no mamen, no todos an­damos robando. Yo por ejem­plo, salgo con mi novia a dar la vuelta y qué, ya por eso va­mos a andar robando, que no se confundan, que se pongan a trabajar bien y que vayan contra los que de veras andan robando, no contra todos”, dijo Jesús Robles, uno de los entrevistados.

Otro motociclista entrevis­tado dijo muy molesto: “Pues qué mal que hagan este tipo de comentarios y qué mal también que estén diciendo motorratones, o motoladro­nes, digo, sí hay un problema con esos que andan haciendo desmadre en sus motos y que andan robando, esos son de lo peor, pero para eso no tienen por qué hacer operativos para andar parando a todos, hay quienes sólo vamos tranquilos a trabajar o dar la vuelta, que vamos en moto porque no te­nemos carro y porque motoci­cleta es lo que pudimos pagar, pero es nuestra y no andamos robando, yo creo que está mal, a mí no me parece”.

Se supone que los operati­vos se harán en los “principa­les corredores gastronómicos de Guadalajara”, tales como avenida Chapultepec, el cen­tro de la ciudad, la calle Ló­pez Cotilla y la avenida Amé­ricas, entre otros sitios donde hay gran concentración de personas.

Por cierto que ayer el pre­sidente municipal de Guada­lajara, Pablo Lemus Nava­rro, dijo que este operativo sería sólo contra aquellos motociclistas que andan en parejas, y sin portar los ele­mentos que marca la ley de movilidad como los chalecos reflejantes y los cascos, algo que a decir de los entrevista­dos es un pretexto para parar motociclistas y quitarles sus vehículos, o bienf para abo­nar a la corrupción.