El producto es único en el mundo, aseguran

Fotografía relevante a la nota.

El alimento granulado es resultado de una investigación en la que los universitarios crearon una dieta específica para el ajolote mexicano que hasta ahora no existía ni en México –de donde esta especie de salamandra es originaria–, ni en ninguna otra parte del mundo/Fotos: Cortesía

Investigadores del Cen­tro Universitario de la Costa (CUCosta), con sede en Puer­to Vallarta, crearon un ali­mento para ajolotes, único en su tipo, cuya patente está en trámite ante el Instituto Mexi­cano de la Propiedad Intelec­tual (IMPI) y que permitirá a los creadores de esta especie generar mejores condiciones para el crecimiento y repro­ducción del animal.

El Jefe de Laboratorio de Calidad de Agua y Acuicultu­ra Experimental del CUCosta, doctor Fernando Vega Villa­sante –quien encabeza el equi­po integrado por académicos y estudiantes de posgrado–, explicó que han sometido ante el IMPI ésta invención que po­dría ser la primera en el país.

“Desarrollamos una solici­tud de patente que la Univer­sidad nos ayudó en el trámite y se encuentra, desde junio, sometida ante el IMPI, que significa que no hay alimen­tos similares. Esperamos que pase para tener la titularidad de la invención”, anunció.

Este alimento granulado es resultado de una investigación en la que los universitarios crea­ron una dieta específica para el ajolote mexicano que hasta aho­ra no existía ni en México –de donde esta especie de salaman­dra es originaria–, ni en ninguna otra parte del mundo.

Fotografía relevante a la nota.

Investigadores del CUCosta crean alimento para ajolotes

“No había una dieta. Nos di­mos a la tarea de buscar una a nivel internacional porque mu­chos países tienen criaderos de este mismo ajolote, porque lo utilizan para investigación mé­dica, investigación en virología, genética, entre otras; y diseña­mos una dieta basándonos en nuestros conocimientos de nu­trición, donde se establecieran los requerimientos de proteína y energía para que los organis­mos pudieran crecer de manera óptima”, explicó.

Por meses, los especialistas probaron las dosis y el balan­ce de los nutrientes que ofre­cían a los ajolotes que tienen en el criadero del laboratorio y que cuenta con ejemplares legalizados ante las autorida­des federales.

El resultado fue un ali­mento basado en proteínas y aceites de pescado, que fue ampliamente aceptado por los ajolotes, quienes presentaron buenos indicadores de ali­mentación y crecimiento.

“Es un alimento con los niveles óptimos de proteínas y lípidos, y con una palatabi­lidad (gusto) adecuada para el ajolote y para su desarrollo, tanto reproductivamente ha­blando como en su crecimien­to”, explicó Vega Villasante.

Una vez que el IMPI apruebe la invención, este ali­mento podría ser producido, distribuido y comercializado para que otros criadores de ajolotes puedan utilizarlo; se trata de un producto que hasta ahora no existe.