Ciudadanos boicotean los ilegales procedimientos

Por Rafael Hernández Guízar

Fotografía relevante a la nota.

Además de violentar derechos constitucionales, los retenes a automovilistas y motociclistas son una pérdida de tiempo y un despilfarro de recursos humanos, pues los policías viales entregan volantes del programa de verificación en lugar de hacer su trabajo, como vigilar al transporte público o mejorar la circulación vial, tronó el activista Jaime Aldrete/Foto: Archivo Página 24

Cansados de los ilegales retenes, un grupo de ciudada­nos salieron ayer a las calles de Guadalajara para boico­tear los puntos donde policías viales en grupo detenían a los automovilistas.

“Hoy nos reunimos en pleno centro, frente al con­greso un grupo de ciudada­nos que queremos poner el ejemplo a los demás ciuda­danos de que sí se puede de manera respetuosa protestar contra los abusivos retenes que implementa vialidad (sic) y Semadet, hoy fuimos a ave­nida Patria y Río Nilo donde estaba el retén de ‘socializa­ción’, que estaba molestando a los automovilistas, haciendo un desmadre con el tráfico, y pusimos una lona con una imagen que decía ‘cuidado, rateros adelante’, y a nuestra ­llegada les dieron la orden de que se retiraran”, senten­ció Jaime Aldrete Medina, el presidente de la Coordinadora Jalisciense de Asuntos Medio Ambientales.

Con una lona que indi­caba “Cuidado, rateros más adelante”, los ciudadanos enfurecidos por los retenes advertían a los conductores que se ubicaban en los cru­ces de las avenidas Patria y Río Nilo de Tonalá: “El encargado dijo una serie de cosas que no tienen sentido, que era un programa de so­cialización, como si los po­licías viales no tuvieran más qué hacer, y vamos a seguir haciéndolo de forma conti­nua, para desbloquear los retenes, con estos y con los de los motociclistas, porque los retenes son inconstitu­cionales porque violentan los derechos de los ciudada­nos”.

Pero dejó en claro que no será la única protesta ya que habrá continuidad en los boicots a los retenes, al con­siderar que es un desperdicio de recursos y sobre todo, la legalización de lo ilegal: la violencia de los derechos hu­manos.

“Pues sí vamos a seguir protestando con estos opera­tivos ciudadanos porque ni modo que no haya otras cosas que hacer, y el hecho de que estén pagándole a los policías viales de nuestros recursos para que repartan volantes nos parece una pendejada, es como una patada en la cara”, indicó.