Le cortan agua a vecinos y no acaban trabajo, acusan
Lo peor es que les dijeron que no usaran agua en tanto concluían de reparar, pero los trabajadores de la intermunicipal no se han parado a terminar lo que iniciaron
Por Rafael Hernández Guízar
Un enorme agujero en la calle 44 puso en riesgo las viviendas de varias de familias.
Se trata de un socavón que se ubica por la calle Ramón Blancarte, mejor conocida la como la 44, en las afueras del número 276, donde una mujer relató como una obra abandonada del Sistema Intermunicipal de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA) se agravó aún más, pues se cayeron dos postes y un árbol producto de las fuertes lluvias de los últimos días en esta ciudad capital.
“Mire vino el SIAPA a arreglar el agua tres veces y no ha tapado, y con la lluvia de ayer se puso peor porque se cayeron tres árboles, y está afuera de mi casa”, dijo una de las afectadas.
–¿Y el SIAPA qué le dice?
–Pues que tienen un seguro, y que van a arreglar, pero nada. Esto me preocupa mucho, está afuera de mi casa, queremos que vengan a arreglar aquí, me dejaron sin drenaje, que no usara nada de agua, que según eso me iban a arreglar, pero no puedo usar el agua, está todo a la mitad, luego aquí afuera está el socavón.
Ella había pagado 15 mil pesos por el arreglo de su fachada y el piso, llegó el SIAPA y lo destruyó, pero ahora, ni su drenaje funciona.
“Mire me gasté 15 mil pesos para arreglar la fachada, para poner el piso y todo, y ahora no sé qué va a pasar, y del ayuntamiento pues no nos han dicha nada, no nos han dicho si nos van a apoyar, andan arreglando banquetas en otros lados, pues que vengan a ayudarnos, ojalá que sí nos apoyen”.
Han reportado el problema al SIAPA y la respuesta no llega, viven con miedo a que se dañen aún más sus viviendas, además de la molestia de no poder usar ni el baño.
Asimismo, del ayuntamiento de Guadalajara tampoco ha recibido ayuda. Habían reportado un peligroso árbol que finalmente se cayó pese al peligro que esto suponía; de la administración municipal les querían cobrar una fuerte suma por atender su obligación a través de la Dirección de Parques y Jardines.
“Nosotros habíamos ya pedido ayuda por lo de los árboles, pero nos cobraban 30 mil pesos, y pues no, ni modo de estar pagando eso”.
El llamado fue tanto al SIAPA como al ayuntamiento tapatío, para que en conjunto solucionen el problema que por omisiones se va agravando cada vez más.