Activistas, luchadores sociales, abogados, entre los aspirantes
Por Elizabeth Ríos Chavarría
Ayer, en el Congreso de Jalisco, concluyó el registro de aspirantes que buscan la presidencia de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDHJ); en total se apuntaron 29 perfiles, de los cuales 14 fueron mujeres y 15 hombres.
Hace un par de semanas en el Congreso se emitió la convocatoria para renovar la presidencia de la comisión, por lo que ayer activistas y luchadores sociales, abogados y hasta propios integrantes de la institución se hicieron presentes para formalizar su registro y competir por el cargo de ombudsman.
El 2 de agosto arrancará funciones, por un periodo de cinco años, el defensor de derechos humanos, y en este sentido algunos de los perfiles que se registraron ayer hablaron sobre lo que se requiere para mejorar la labor de la CEDHJ.
“El principal punto que existe en la comisión es el lograr los mecanismos institucionales para que esta sea una comisión de verdad procedimentalmente cercana a las personas, que se convierta en un espejo que potencialice la defensa estratégica de los derechos humanos. Que esta comisión pase de ser una defensoría aún insuficiente a una eficaz para acompañar con cada uno de sus instrumentos a las personas”, expresó Tunuari Chávez González, de la Unidad de Análisis y Contexto de la CEDHJ.
La forma en la que evaluarán diputados a aspirantes será prácticamente mediante un ensayo, sin embargo, algunos perfiles mencionaron que la preparación y trayectoria demostrada puede ser suficiente para que legisladores tomen una determinación con el próximo defensor de derechos humanos.
“Lamentablemente la comisión no tiene dientes. Nosotros lo que queremos es investigar, actuar de oficio para efectos de poder proteger los derechos fundamentales de todos a la vida, a la salud, a la educación, y sobre todo en cuanto a los niños; lo que buscamos nosotros es que ya no sea una bolsa de trabajo”, refirió por su parte José Luis Tello Ramírez, del Consejo de Colegios de la Abogacía del Estado de Jalisco.
Si bien muchos de ellos dijeron confiar en el proceso que legisladores llevarán a cabo, pues consideran que la observancia de la ciudadanía hará que el mismo no se preste a las famosas “cuotas” entre partidos, hay quienes manifestaron que la convocatoria fue omisa en varios aspectos.
“El proceso debió de haber sido abierto y transparente. Lo que observamos es un proceso cerrado, que apunta a la opacidad, que puede derivar a acuerdos detrás de las mesas, que desde luego consideramos pervierten y deforman el sentido que debe tener esta institución”, añadió Jaime Hernández Ortiz, de la Coordinadora 28 de Mayo.