Habitantes viven intranquilos por rampante inseguridad

Por Rafael Hernández Guízar

Fotografía relevante a la nota.

La problemática de delincuencia y pandillerismo se extiende a lo largo y ancho de la comunidad de Las Juntas, pero recrudece en los alrededores de las vías del tren y los pasos a desnivel/Foto: Francisco Tapia

La inseguridad no para en las calles de la comunidad de Las Juntas, en San Pedro Tla­quepaque.

Y es que a decir de ha­bitantes de esta comunidad ubicada en la zona sur de la ciudad, en los límites con Guadalajara, las problemáti­cas de inseguridad son enor­mes, al grado de que ya no pueden siquiera salir a las ca­lles tranquilos.

“Mucho vago, mucho dro­gadicto, y luego también que andan ya asesinando adentro de las casas, ya eso está bas­tante fuerte, ya no se puede ni salir tranquilo porque hay miedo de que le vayan a qui­tar a uno su celular, que le vayan a robar la cartera…, es más, que lo vayan a desapa­recerlo a uno, sí da miedo la verdad, hace falta que haya más presencia del gobierno en la calle, de la policía, más orden”, sentenció uno de los vecinos entrevistados.

“Uno teme, yo temo por mí y por los míos. Yo a las seis ya me recojo en mi casa y no dejo que salgan ni a la tienda, así de plano, porque uno teme que le vayan a quitar sus co­sas que con tanto esfuerzo se compra, por lo mismo de que no hay policía, no hay gobier­no, no hay control”, agregó el molesto ciudadano.

La problemática se ex­tiende a lo largo y ancho de toda la comunidad, pero re­crudece en los alrededores de las vías del tren y los pa­sos a desnivel.

Cansados de vivir de esta manera, los habitantes de di­cha comunidad hicieron un llamado a su presidente mu­nicipal Citlali Amaya, a quien le exigieron que haga presen­cia en la colonia para poner medidas inmediatas.

“Pues puras promesas que nunca cumple, no ha venido para acá, yo quisiera que vi­niera y que viera cómo está todo, que no se vaya con lo que le digan, si ella dice que hay seguridad, que se venga a vivir acá a ver qué piensa, que venga y nos ayude, que vea cómo vivimos los ciudadanos de Tlaquepaque”.

Además de la falta de vigi­lancia policiaca, también hay muchas carencias en la dota­ción de otros servicios públi­cos como el alumbrado.

La mayoría de las lumina­rias están en desuso porque desde hace tiempo no se le ha dado mantenimiento, por ello los delincuentes aprovechan la oscuridad para acechar a sus víctimas.

También la recolección de basura es un problema y por ello se abarrotan las bolsas de desperdicios todos lados.

Y a esto se agrega los problemas que representa el paso del ferrocarril, cons­tantes daños a las propie­dades que se notan con la presencia de grietas en las fachadas y el interior de las casas.