Revelaría malas prácticas en el servicio público: Óscar Vásquez

Por Elizabeth Ríos Chavarría

Fotografía relevante a la nota.

“La democracia no son solo procesos electorales, es empoderar a la ciudadanía, esta es la piedra angular de la lucha contra la corrupción”, puntualizó el diputado morenista Óscar Vásquez sobre su propuesta/Foto: Cortesía

Para incentivar la partici­pación ciudadana y ampliar el combate a la corrupción, el diputado local de Morena, Ós­car Vásquez Llamas, presentó una iniciativa de reforma con la que busca institucionalizar la denuncia anónima.

Con modificaciones a va­rios artículos de la Ley del Sistema de Participación Ciudadana y Popular para la Gobernanza de Jalisco, de­talló el legislador, lo que se busca es reconocer la denun­cia anónima como un nuevo mecanismo de participación ciudadana.

“Esto tendría como fina­lidad dar la obligación a los poderes del estado e insti­tuciones públicas para que habiliten un espacio físico y virtual para que la ciudadanía pueda presentar denuncias anónimas en contra de los ser­vidores públicos que cometan actos de corrupción o abusos que violenten sus derechos”.

Detalló que con esto ade­más se generaría una base de datos para visibilizar todas aquellas malas prácticas que existen en el servicio público y así resolverlas ya que, enfa­tizó, el municipio es el nivel de gobierno más cercano a la ciudadanía -que provee de servicios básicos- y en donde el ciudadano a su vez se en­cuentra con el primer obstá­culo para acceder a derechos humanos.

“Con la presente iniciativa estaríamos garantizando el ac­ceso a los derechos de primera generación, los cuales fueron agrupados en derechos civiles y políticos, así como los de cuarta que tiene que ver con un conjunto de posibilidades autodefinidas no solo con las generaciones, sino también con la evolución de nuestro entorno tecnológico a través de la innovación”.

Recordó que el servicio público ha sido menoscabado como consecuencia de las ma­las prácticas que existen den­tro de los poderes del estado e instituciones públicas, de ahí la importancia de la partici­pación de la ciudadanía para dotar de instrumentos que permitan hacer frente a todos los estragos de la corrupción y el abuso del poder.

“Las distintas prácticas de corrupción son el principal obstáculo para el desarrollo y crecimiento de un país, los estados y sus municipios. De­bemos luchar enérgicamente para transformar esta situa­ción de la mano con la ciuda­danía. La democracia no son solo procesos electorales, es empoderar a la ciudadanía, esta es la piedra angular de la lucha contra la corrupción”, concluyó.