“No tienen servicio de agua ni de luz, no tienen piso”

“Para mí son como si estuvieran en obra negra, y eso es en todos los niveles, desde el primero hasta el tercero, todos están igual de mal”, truenan locatarios

Por Rafael Hernández Guízar

Fotografía relevante a la nota.

La mercancía de los comerciantes de San Juan de Dios se están echando a perder por las lluvias; urgen les entreguen sus locales. “El presidente (Lemus) dijo que los iba a dar con todos los servicios y pues parece que el que ya lo recibió (sin servicios) ya se chingó prácticamente”, dijo una comerciante al ver los pocos locales que ya han entregado/Fotos: Francisco Tapia

Ya entregaron algunos locales comerciales del mer­cado San Juan de Dios, pero están en obra negra, según denunciaron los mismos lo­catarios.

“No tienen agua potable ni electricidad”, fue la queja de algunos de los comercian­tes a los que les dieron los lo­cales “reconstruidos” tras el incendio que hace unos me­ses acabó con casi la mitad de este tan importante centro de comercio.

La promesa que hizo el alcalde de Guadalajara, Pablo Lemus Navarro, fue que en un tiempo record estarían listos y en óptimas condiciones para seguir trabajando con norma­lidad, pero ni fue en tiempo récord, ni tampoco están en las mejores condiciones, fue la queja generalizada.

“Los están entregando inconclusos, no tienen ser­vicio de agua, no tienen ser­vicio de luz, no tienen piso, para mí son como si estuvie­ran en obra negra, y eso es en todos los niveles, desde el primero hasta el tercero, todos están igual de mal”, dijo una de las comerciantes muy molesta, quien prefirió el anonimato por temor a re­presalias.

Y siguió: “Ya a los que les entregaron pues yo creo que ya se fregaron, así los van a tener que arreglar ellos, pero el presidente (Lemus) dijo que los iba a dar con todos los servicios y pues parece que el que ya lo recibió ya se chingó prácticamente, en­tonces no sé qué va a pasar, porque pues así no está en condiciones para usarse, hay que invertirle y de dónde, no hay dinero ni para comprar mercancía, menos para equipar el local”.

Y es que, quienes en el incendio perdieron sus loca­les, fueron acomodados en la calle, con la promesa de que tendrían un sitio digno para seguir vendiendo ya que hay que recordar, que las instala­ciones del mercado son pro­piedad del Ayuntamiento, es decir, es la administración pú­blica municipal la que tienen la encomienda y el deber de equiparlos y hacer que estén en las mejores condiciones para operar y abrir al público.

Aunque algunos locata­rios los aceptaron, la ma­yoría de los entrevistados se dijeron inconformes y exigieron al alcalde Pablo Lemus Navarro que cumpla con lo dicho en medios de comunicación y que su mer­cado les sea equipado como antes del incendio.