Ya ni espacios hay en los albergues de Guadalajara, denuncian

Por Rafael Hernández Guízar

Fotografía relevante a la nota.

Cuando estaba en campaña, Pablo Lemus incluso prometió que mejoraría la situación de los indigentes; al día de hoy, fuero sólo palabras: “Ese cabrón nos mintió, no hay espacios en los albergues, a veces no alcanzamos comida”, lamentaron personas en situación de calle/Foto: Francisco Tapia

Indigentes en Guadalaja­ra se pronunciaron contra el alcalde tapatío Pablo Lemus Navarro, dijeron que les dio la espalda.

Pese a que fue promesa de campaña trabajar por evi­tar y atender la indigencia en Guadalajara, son los mismos indignes quienes señalan que no hay manera de salir de las calles, que están condenados a vivir durmiendo en la ban­queta porque ya ni espacios hay en los albergues de Gua­dalajara.

“En realidad mire, no, no nos cumplió, es como cuan­do llegan, que dicen que van a ayudar pero nada. Vea por ejemplo, este caballero que fue policía hace tiempo, el gobierno le dio la espalda, porque no ha tenido apoyo, fue policía y acabó en la ca­lle, estuvo desde el ‘82 hasta el ‘90, lo dieron por muerto por un golpe en la nuca, no le dieron nada, ni retiro ni nada”, dijo uno de los entrevistados quien lamentó el caso de uno de sus compañeros de calle que fue policía y ahora, es pe­digüeño.

Ese mismo ciudadano, el ex policía, por su pate se dijo muy dolido con el go­bierno municipal y con el del estado a los que prestó sus servicios, pues no le han ayudado en nada.

Fue un golpe en la nuca lo que lo dejó casi muerto y ni su liquidación recibió, su familia lo abandonó y no le quedó más remedio que ir a parar a la calle.

“Mire el gobierno que se vaya a la verga (sic), la neta es que apoyan a centroameri­canos, a hondureños, a cabro­nes que se quedan aquí a pe­dir limosna, a charolear (sic), pinche gobierno culero, apo­ya a tu gente, a la gente que vivimos aquí en la calle, pin­che gobierno culero”, lamen­tó, pues según su experiencia, es más fácil que apoyen a un migrante que a un indigente en la misma ciudad capital de Jalisco.

Gustavo Reynosa, otro de los entrevistados, dijo que ve con desánimo cómo el alcalde tapatío no les ayuda desde su gestión, no hay espacios para poder dormir en otro sitio que no sea la misma calle, y a ve­ces ni de comer alcanzan.

“Mire usted, Pablo Lemus prometió en su campaña algo que no ha cumplido, él dijo que nos iba a dar la oportu­nidad de reintegrarnos a la sociedad, porque estamos en situación de calle güey, en­tonces este cabrón (sic) no­más prometió, nomás dijo, y a la hora de la hora, nada, nomás prometió y no cumple, me habló de lugares tipo CA­DIPSI, hasta de una tal Mamá Lupita, de Ángeles y Serafi­nes, de San Juan Grande, pero llegamos allá y está saturado, está lleno, hay muchos, por­que somos muchos, entonces este bato de Lemus no tenía que prometer lo que no puede cumplir”.

Pero fue más allá: “Me siento engañado, me siento robado, y que Dios lo bendi­ga y lo haga gente de bien, eso opina el Gustavo René Reynosa, no hay lugares para dormir, está lleno, sí dan algo de comer, pero para dormir no, está saturado, entonces si Lemus o Alfaro, o López Obrador, chingada madre, si quieren ayudar pues que ha­gan lugares porque somos bien muchos, eso es todo”.

Aunque están en la calle tienen lucidez, no han pa­sado el umbral de la incon­ciencia y esperan que llegue alguna oportunidad para sa­lir de esa vida y ser de nueva cuenta productivos, incluso tener de nuevo un hogar y una familia.