Tradición y sabor para los paladares tapatíos
Por Rafael Hernández Guízar
El barrio de las 9 Esquinas en Guadalajara vuelve a ser noticia con la tradicional venta de pitayas.
Decenas de personas aprovechan la temporada que hizo el pasado mes de abril incluida en los primeros días de junio para ofrecer este fruto tan singular, la pitayas o Pitahaya –como también se le conoce–, y que llega desde el sur de Jalisco para complacer a paladares en la Gran Ciudad.
“Es la temporada, y las que más piden son las blancas y las rosas, son las más dulces (…) yo las compro y las traigo de Amacueca y de Sayula que son los lugares donde más se dan también en Techaluta”, dijo Guillermina Velázquez, una de las vendedoras entrevistada por Página 24.
Esta mujer que lleva años aprovechando la temporada de la pitaya Indicó que por fortuna, al día venden aproximadamente unas 300 frutas de estas, lo cual representa un ingreso económico bastante bueno para ella y los suyos.
“Pues sí va bien, se han de vender unas 300 diarias. Hay que aprovecharlas porque nada más son dos meses, pero este año sí subió mucho el precio, a comparación del año pasado”, indicó.
Hay pitayas para todos los bolsillos. Van desde los tres pesos hasta los 20, en el caso de las más grandes, precio que es por pieza, pero que no detiene a cientos de tapatíos para llevarse hasta por cajas estas frutas que se obtienen de una zona árida, de los cactus que están en las cercanías de la laguna seca de Sayula.
Nosotros mismos tuvimos la oportunidad de platicar con varios de los comensales que acuden a este tradicional barrio para llevarse la mayor cantidad de pitayas que su economía les permite.
“Ah sí, bien rica oiga, nosotros cada año venimos de aquí, y cuando ya se va a terminar la temporada aprovechamos para darnos una vuelta allá por la zona de Sayula y Amacueca, porque allá la dan más barata todavía, y hay más variedad pero si uno no quiere salir de la ciudad aquí en las 9 Esquinas es donde uno puede encontrar muy surtido y a buen precio”, indicó Rosaura Castellanos, otra de las entrevistadas.
Se trata de unas frutas de forma esférica, similares a la tuna, y con una gran cantidad de pequeñas semillas adentro.
Su sabor es sumamente dulce, sobre todo aquellas que son de color rosado y las blancas, siendo estas las preferidas por la mayoría de los tapatíos.