Es un grave problema en Jalisco y México: María Jara

Por Elizabeth Ríos Chavarría

Fotografía relevante a la nota.

La diputada emecista María Dolores López Jara, presentó una iniciativa de reforma con la finalidad de reconocer y sancionar la violencia física derivada de lesiones con sustancias corrosivas, tóxicas o inflamables en contra de mujeres y niñas/Foto: Cortesía

María Dolores López Jara, diputada local de Mo­vimiento Ciudadano (MC), presentó una iniciativa de reforma con la finalidad de reconocer y sancionar la violencia física derivada de lesiones con sustancias corrosivas, tóxicas o infla­mables en contra de muje­res y niñas.

Con diversas reformas a la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Li­bre de Violencia y al Có­digo Penal de Jalisco, la propuesta de la emecista contempla implementar además protocolos de ac­tuación y regular la venta de ácidos.

También va por asentar sanciones de 9 a 12 años de prisión a quien lesione con ácidos o cualquier tipo de sustancia corrosiva a cual­quier persona, agravándose la pena un tercio cuando los daños sean en cara, cuello, brazo, mano o que afecte la funcionalidad de los órga­nos sexuales.

A decir de la presidenta de la Comisión de Igualdad, en el Congreso de Jalisco, es necesario reformar al respec­to por los antecedentes que ya se tienen en la materia a lo largo del país.

Al respecto, no dejó de recordar el caso de Carmen Sánchez quien, en 2014, fue atacada por su ex pare­ja con ácido, provocándole severas quemaduras que solo fueron calificadas por el ministerio público como “simples”, a pesar de que hasta la fecha lleva más de 57 cirugías.

“Es visibilizar como lesiones graves y que aun­que no pongan en peligro la vida, sí son irreversibles los ataques con ácidos (…). En estos no vemos una in­tención de feminicidio, es peor, marcar a las mujeres de por vida, echarles a per­der su figura, su rostro, pero sobre todo su dignidad”.

Dijo que en México al menos 32 mujeres han sido víctimas de ataques con ácido -la semana pasada en el estado se tuvo un caso-, de las cuales 6 han falleci­do, mientras que otras es­tán en una lucha constante por salir adelante y retomar sus vidas.

“No obstante ello, no hay un registro confiable en las entidades de la repúbli­ca sobre el número real de víctimas de ataques con áci­do, ya que muchas de estas no denuncian, ya que estas agresiones, en la mayoría de los casos, como se men­cionó, se clasifican como le­siones en general que tardan menos de 15 días en sanar, por lo que no son procesa­das penalmente o son subes­timadas y catalogadas como conductas no graves”.

Recordó el caso de la saxofonista en Oaxaca o el caso de Jalisco, en octubre del 2020, en donde una per­sona atacó con ácido a una mujer trans en pleno Cen­tro Histórico de Guadalaja­ra. Todo esto, añadió, como la muestra de un problema que persiste y que se debe combatir.

“La propuesta presente es para dar certeza a muje­res y niñas para la preven­ción, regulando la venta, implementar protocolos en la Secretaría de Salud, pero sobre visibilizar que este tipo de ataques va direccio­nado para dejar daños per­manentes y de vida a muje­res y niñas”.