Destacan que es única en América

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Se trata de la “Sedum dormiens”, una planta conocida como suculenta rupícola endémica de la Sierra de Manantlán; la investigación contribuye a que se pueda conservar la especie, y sea conocida en México y el munod/Foto: Cortesía

Investigadores del Centro Universitario de la Costa Sur (CUCSur), de la UdeG, des­cubrieron una nueva especie de planta que sólo se encuen­tra en las partes más altas de la Sierra de Manantlán, en Jalisco, por lo que pue­de considerarse una especie rara, afirmó el académico del Departamento de Ecología y Recursos Naturales, doctor Ramón Cuevas Guzmán.

El hallazgo de la especie Sedum dormiens, una planta conocida como suculenta ru­pícola es la primera especie nueva descrita de México para este año, ya que el estu­dio académico que la clasifica fue publicado en los primeros días de enero de 2022.

El especialista explicó que su localización es produc­to de un trabajo de recolecta botánica que se ha venido realizando en la Sierra de Ma­nantlán por más de 40 años y que da cuenta de la diver­sidad biológica de esta zona, en la que investigadores de la UdeG han hecho estudios y trabajo de campo en diversas disciplinas.

Detalló que los primeros ejemplares de la especie fue­ron recolectados por el doctor Hugh H. Iltis, botánico de la Universidad de Wisconsin-Madison, en 1980. Los reco­rridos posteriores en la parte alta de la Sierra de Manant­lán de los investigadores del CUCSur permitieron recolec­tar material en todas las fases fenológicas de la planta, es decir, desde su brote hasta la obtención de frutos y caída de hojas, y hacer observaciones detalladas de campo.

“Esto llevó a la sospecha de que se trataba de una espe­cie nueva para la ciencia, lo cual fue corroborado al hacer una revisión minuciosa de los ejemplares de la especie y la literatura pertinente para el grupo; finalmente, los carac­teres propios de la especie, los cuales son diferentes a las ya conocidas dentro del géne­ro, nos llevaron a proponer a la especie nueva”.

Cuevas Guzmán detalló que se trata de una especie de importancia científica para el mundo por sus caracteres de adaptación ambiental, “que podrían dar luz para el en­tendimiento de caracteres de forma y apariencia (morfoló­gicos), así como de su fun­cionamiento (fisiológicos) en la adaptación para la re­sistencia al frío y la sequía. Para la Sierra de Manantlán es una especie más que pone de manifiesto la riqueza flo­rística del área y como una región de especiación, de donde la especie es endémi­ca”, subrayó.

El nombre de la especie, Sedum dormiens “el sedum que duerme”, se refiere a que la especie tiene algo distintivo que son las yemas que pasan la estación fría y seca del año persistentes en la planta ma­dre y en estado de latencia; es decir, que los pequeños brotes que se producen en la plan­ta madre y que darán vida a nuevos tallos no se separan de ella hasta que el nuevo brote o individuo ha generado nuevas raíces y éstas se han anclado a la superficie del suelo.

Este carácter no se ha re­gistrado en ninguna otra es­pecie de Sedum en el Conti­nente Americano, pero sí la comparte con otros géneros como la Hylotelephium y la Petrosedum, que se distribu­yen en Europa y Asia.

Cuevas Guzmán explicó que esta investigación con­tribuye a la conservación de la especie, dándola a cono­cer para la ciencia, México y el mundo, y catalogándola de acuerdo con los paráme­tros de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza como en peligro de extinción.

“La información es com­partida con la Dirección de la Reserva de la Biósfera Sierra de Manantlán, la ins­tancia federal encargada de la administración del área natural protegida, para que tengan en consideración la zona donde la especie cre­ce como una región de alta diversidad y endemismo que debe ser conservada. Además, nuestro trabajo permite hacer un monitoreo continuo de las áreas donde la especie crece y con ello observar la dinámica de las poblaciones”, concluyó.