Nos tiene el pie en el cuello, truenan sobrevivientes del 22 de abril
Por Elizabeth Ríos Chavarría
Ana Lilia Ruiz, presidenta de la asociación 22 de Abril de Guadalajara, criticó la actitud criminal del mandatario estatal y sus subalternos, quienes pareciera que buscan “dejar morir” a los sobrevivientes de las explosiones, pues no hay apoyos para cirugías, prótesis o medicamentos/Foto: Francisco Tapia
Porque de este gobierno solo han recibido promesas, afectados por las explosiones del 22 de abril de 1992, en el barrio de Analco, exigieron al gobernador Enrique Alfaro Ramírez cumplir con su palabra de apoyarlos; se dijeron cansados de tener que mendigar lo que el estado les debe de proporcionar.
A unos días de que se cumplan 30 años de la tragedia la presidenta de la asociación 22 de Abril de Guadalajara, Lilia Ruiz Chávez, hizo presencia ayer por la mañana a las afueras de palacio de gobierno –junto con otros sobrevivientes más– a fin de alzar la voz nuevamente en torno a las necesidades médicas que hasta el momento no les han cumplido en su totalidad.
“Con el partido que sea, el color que esté gobernando, se portan unos peor que otros, no puedo decir que mejor porque no ha habido uno solo que lo haga, pero la verdad es que esta administración sí nos vino a poner el pie en el cuello. Viene quizá con la intención de que por falta de atención médica desaparezcamos y hacer que desaparezca el problema de los sobrevivientes de las explosiones del 22 de abril”.
La semana pasada representantes de este grupo de afectados, explicó, se reunieron con autoridades estatales para plantear las principales necesidades que tienen en torno a aspectos médicos, como la falta de prótesis, cirugías, medicamentos y otros aparatos, sin embargo, dijo nuevamente que están cansados ya que el estado se la ha vivido los últimos tres años en promesas que no llegan a nada.
“Consideramos que esto es criminal, consideramos que esto es injusto, consideramos que se nos está violentando a las víctimas encima de haber sido violentados nuestros derechos humanos el 22 de abril de 1992, se nos siguen violentando 30 años después, es por eso que estamos inconformes con todo lo que está sucediendo, y le decimos al gobernador ¿qué pasó con lo que prometió? ¿Qué pasó con todo lo que iba a hacer por nosotros? Nos está defraudando como ciudadanos”.
Recordó que empezaron 74 lesionados en el fideicomiso mediante el cual se ven beneficiados y que actualmente quedan 69, por lo que reiteró el llamado a autoridades a no dejarlos en el olvido, pues la lucha que emprendieron hace tres décadas continúa sin tener certeza de cómo es que van a acabar ante las secuelas con las que terminaron.
“Las explosiones del 22 de abril es la mayor tragedia de Guadalajara desde que se fundó la ciudad, y nosotros no solo somos sobrevivientes somos ciudadanos, la mayoría adultos mayores, y nos enfrentamos a una serie enorme de obstáculos que tenemos que superar para vivir de la forma en que nos dejaron las explosiones”.