Policías viales y estatales cazan a quienes traen hologramas “pirata”

Por Rafael Hernández Guízar

Ciudadanos se dijeron muy molestos contra el gobierno del estado, pues al momento policías viales y estatales or­ganizan redadas para detectar hologramas de verificación piratas.

Y es que a decir de muchos, en lugar de combatir el crimen, en el gobierno del estado se han dedicado a imponer sanciones a los automovilistas a través de retenes ilegales que son nom­brados por la autoridad como socialización de la verificación vehicular.

“Andan metiendo al bote a peligrosos delincuentes que traen peligrosos holo­gramas; a los narcos, los matones y los que matan y roban no importan, esos son menos dañinos para la so­ciedad que los que compran un holograma de verifica­ción para que dejen de estar chingando. Digo la verdad, es que esto es muy lamen­table, porque lejos de que haya resultados hay cada día más desmadre en todos lados, los del gobierno en perdonando delincuentes”, lamentó Juan Vázquez, uno de los entrevistados por este reportero.

“Nomas dígame qué es más urgente, que anden po­niendo multas a diestra y si­niestra o que patrullen para que de verdad agarren a los rateros, a los que andan le­vantando gente, a los que andan armados en las calles o vendiendo droga, a esos güeyes nadie les hace nada porque yo creo que les tie­nen miedo a en el gobierno. Ah pero qué tal para chingar al ciudadano, eso sí les sale a toda madre”, agregó el molesto ciudadano.

Lo anterior se replica por textos publicados por los ciudadanos a través de redes sociales.

Y es que elementos de la Policía Vial y de la Secreta­ría de Medio Ambiente junto con la policía estatal, organi­zan retenes inconstituciona­les en diversos puntos de la ciudad que son nombrados como socialización del pro­yecto de verificación vehi­cular que lleva a cabo la Se­cretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial.

Dichos retenes carecen de legalidad, pues de acuerdo con la Constitución mexica­na nadie puede ser molesta­do en su persona, papeles o propiedades, sino en virtud de mandamiento escrito y expedido por la autoridad competente que funde y mo­tive acto; al no cumplir con estas formalidades, dicho acto administrativo carece de toda validez, incluso po­dría configurarse como un abuso de autoridad de acuer­do con el código penal para el Estado de Jalisco.

Pero lo anterior el ser es conocido por la mayoría de las personas es pasado por alto.

En tanto la autoridad esta­tal, realiza este tipo de rete­nes en los que a los conduc­tores sin motivo alguno se les solicitan los documentos del automóvil que van ma­nejando, otra de legalidad con la que se han levantado cientos de infracciones.