Residuos estancados vuelven insoportable el ambiente: Vecinos

Por Rafael Hernández Guízar

Fotografía relevante a la nota.

Urge que el ayuntamiento de Tonalá intervenga el arroyo de aguas negras que atraviesa por la calle Emiliano Zapata al cruce con la calle Alberca, pues aunque no es temporal de lluvias brota agua pestilente y llena de desechos, que vuelve insoportable la vida en casas a la redonda/Fotos: Francisco Tapia

Un arroyo de aguas negras atraviesa por la calle Emi­liano Zapata al cruce con la calle Alberca, en la cabecera municipal de Tonalá.

Se suponía que este sería un arroyo de aguas pluviales; sin embargo, aun cuando es tem­poral de invierno y no llueve, continúa brotando agua pesti­lente, llena de desechos sani­tarios y que hace imposible a los vecinos de la zona tener sus ventanas abiertas.

“Huele bien feo, como a huevo podrido, así huele, horrible, y lo peor es que de veras que hasta dan ganas de vomitar, es una cosa que no se aguanta, uno mejor tie­ne que cerrar la ventana y las puertas, y bueno, a veces cuando está haciendo mucho calor pues uno quisiera abrir la ventana para que pasara el aire, pero la verdad es que no se puede tener la ventana abierta, porque como le digo se nos hace bien feo el olor,

eso pues hace que uno tenga ganas de irse de aquí pero desgraciadamente no tene­mos a dónde irnos, porque no tenemos ni dinero”, dijo una de las vecinas entrevistadas.

Y es que esta vecina es una de las más afectadas, pues su casa limita justamente con este canal de aguas nausea­bundas.En el ayuntamiento ya es­tán enterados de la problemá­tica y no han hecho nada al respecto.

Se pidió desde la anterior administración que les ayuda­ran para evitar que continua­ra pasando agua sucia por su comunidad, pero nada se ha hecho.Son aguas negras que vie­nen de las viviendas que están ubicadas en el corazón de la cabecera municipal.

“Pues qué hacemos. Ojalá que el presidente municipal, este Sergio Chávez, sí tenga compasión de nosotros, porque de verdad no sabe lo feo que es vivir así, es bien desesperante que nadie nos haga caso”.

Cansados de vivir con los horribles aromas en su co­munidad, los vecinos de esta zona exigieron a su presiden­te que actúe de inmediato, que envíen personal de la Di­rección de Ecología y a quien sea necesario para resolver el problema de las aguas conta­minadas.