Así de caro nos lo dan a nosotros, advierten en mercado municipal

Por Rafael Hernández Guízar

Todavía no acaba el mes de enero y ya se están fijan­do los precios de los maris­cos para la cuaresma, todo va al alza.

Y es que dese el año pa­sado, los precios de los ma­riscos han bajado apenas unos pesos, por lo que esti­man comerciantes de estos productos del mar, que en la cuaresma que está próxima, podrían dispararse de nueva cuenta, un duro golpe a la economía de las personas.

“Desde el pescado y el camarón, hasta los langos­tinos, la molida de pescado, todo va a subir, no ha bajado desde la otra cuaresma, mire, póngale que ha bajado algo en cada cosa, pero la molida y el camarón sí siguió, incluso el filete. Por ejemplo, el ca­marón está en 240 pesos, son las medidas más grandes, el pulpo está en 290, pero llegó a subir a 340 en la otra cua­resma”, dijo el dueño de una de las pescaderías ubicada al oriente de la ciudad, por la calle 34 de Guadalajara.

“Mire, lo más probable es que todo suba otra vez, por lo mismo muchas personas no vienen ya, quizá les con­viene más comer pollo, otras cosas. La que está más bara­ta es la mojarra de mar, está en 65 pesos, es la mojarra de mar, la chica, pero la de presa por ejemplo está en 75 y es­taba en 50 pesos, el pescado está en 250 el huachinango, es el más caro”, dijo.

Y es que los precios se mantuvieron desde la pasa­da cuaresma, pero advirtie­ron los comerciantes que no es culpa de ellos, sino, de los que les venden a ellos los mariscos pues llega a precios altos, por lo que a penas logran ganar un poco para el mantenimiento de sus negocios.

“Mire sí, comer mariscos es un lujo para algunos, aho­rita sí; pero nosotros tenemos que seguir trabajando, así de caro nos lo dan a nosotros, es lo que tenemos que hacer, caro nos lo dan y pues noso­tros tratamos de sacarlo de manera económica, para que la gente pueda acceder”.

Por ello, ha bajado drás­ticamente la cantidad de clientes, alrededor del 50 por ciento de personas que co­mían mariscos y pescado han dejado de lado este alimento pues ya no ajusta para la ma­yoría de las personas.

“Ahorita sí ha bajado, yo creo que es como la mitad de gente la que viene a com­prar, entonces pues estamos esperando que la gente trate de consumir el producto”, fi­nalizo.