Choferes y pasajeros van sin cubrebocas; no hay sana distancia

Por Rafael Hernández Guízar

Fotografía relevante a la nota.

Como siempre: En los camiones va gente parada en plena puerta, pegados unos con otros, sin que haya la más mínima “sana distancia”, esto a pesar de que el gobierno de Jalisco exigió fomentar el uso de cubrebocas y otras medidas sanitarias para evitar la propagación del COVID-19/Foto: Francisco Tapia


Abarrotados de gente y sin ninguna medida de seguridad sanitaria circulan los camiones del transporte público en Guadalajara.

Aunque es una exigencia por el gobierno estatal el uso del cubrebocas, de gel antibacterial y la sana distancia, así como evitar las aglomeraciones de personas, en los camiones urbanos no hay una sola medida de seguridad sanitaria para evitar los contagios de COVID-19.

“Aquí se ve que ya no hay pandemia, porque está hasta la madre de gente y como que el chofer no entiende o no sé que le pasa pero ya nomás vea cómo va esto y sigue y sigue subiendo gente y pues va vamos casi uno encima de otro y sigue”, dijo muy molesto uno de los pasajeros de la ruta 51 a la que ayer nos subimos para hacer este sondeo.

Gente hasta parada en plena puerta, pegados unos con otros, sin que haya la más mínima “sana distancia”.
Pero no sólo es algo que se vive al interior de esta ruta de transporte público, es algo que se da en todas las rutas y que según los choferes, es la exigencia por parte de los dueños de las unidades quienes les exigen que llenen el camión para tener mayores ingresos por cada viaje.

“Aquí los patrones son los que mandan y como traen cámaras los camiones pues se dan cuenta de cuánta gente anda; ahora, también es que nos pagan por boleto, la verdad es que no tenemos un sueldo como se había dicho, seguimos ganando por boletaje porque si no llegamos a una cierta cantidad de pasajeros no nos pagan todo como es, entonces qué hacemos, nosotros también podríamos contagiarnos y no es que nos guste llevar así el camión, así nos exigen”, dijo uno de los choferes entrevistados.

Lo mismo sucede en la ruta 629, incluso en los camiones que traen rampas para minusválidos la cual es utilizada para meter más y más gente parada, algo que hace que cuando hay alguien en silla de ruedas que requiere del servicio, simplemente los camiones pasan de largo al no haber espacio en los lugares destinados para ellos.