Apoyó desaparición del Instituto de la Mujer y el nombramiento del fiscal Gerardo Solís

Por Elizabeth Ríos Chavarría

Fotografía relevante a la nota.

Claro que debí hacer valer mi voz antes y haber sido menos obediente de mi condición de integrante de una bancada mayoritaria. Reconozco que eso fue un error”, admitió la diputada local sin partido en su último informe de actividades/Foto: Francisco Tapia

Al señalar como desacier­to haber apoyado la desapari­ción del Instituto Jalisciense de las Mujeres (IJM), la di­putada local sin partido Mara Robles Villaseñor, rindió su informe de actividades de los últimos tres años en el Con­greso de Jalisco.

La diputada, que repetirá cargo pero por el partido Ha­gamos, entró a la actual legis­latura por Movimiento Ciu­dadano (MC). En este sentido recordó que los desacuerdos con la fracción en varios te­mas la orillaron a abandonar la bancada, por lo que también calificó como otro desacierto el haber apoyado el nombra­miento de Gerardo Octavio Solís, fiscal de Jalisco.

“Claro que debí intervenir antes, claro que debí hacer va­ler mi voz antes y haber sido menos obediente de mi con­dición de integrante de una bancada mayoritaria. Lo reconozco, me autocritico y re­conozco que eso fue un error, así como mi voto a favor del fiscal. Porque, efectivamente, los balances no tienen que ser del todo bien, pues esas dos cosas las hice mal”.

En este sentido también mencionó las diferencias que se crearon con emecistas cuando solicitó la renuncia del fiscal, por las desapari­ciones forzadas de jóvenes en las manifestaciones del 4, 5 y 6 de junio, en aras de que se llevaran a cabo las investi­gaciones correspondientes de manera imparcial.

Además, no dejó de cues­tionar el fracaso que resultó la famosa “bancada de mujeres que se conformó en el con­greso con todas las diputadas, pues lejos de generar algún cambio lo que prevaleció fue más el interés partidista.

También, destacó su voto en contra para la elección de consejeros de la judicatura, por lo cual la mayoría de di­putados fueron criticados por no apegarse a los criterios de la convocatoria, o su renuen­cia a reducir el presupuesto del área de Cultura en el pa­quete presupuestal de este año.

Por el otro lado, como aciertos calificó las reformas que impulsó en materia de educación para la generación de una nueva ley en la mate­ria, los consejos escolares y la inclusión con perspectiva de género; otras propuestas en cuanto a salud, género y servicio civil; así como la defensa del Comité de Par­ticipación Social (CPS) del Sistema Estatal Anticorrup­ción (SEA), por mencionar algunos aspectos.