Golpe de Calor, lo que más Preocupa

Por Elizabeth Ríos Chavarría

Fotografía relevante a la nota.

Expertos llamaron a los tapatíos a dejar de confundir la dignificación de los animales con su humanización y sobre protección, pues en la mayoría de los casos -por desinformación- las especies reciben cuidados que resultan contraproducentes/Foto: Francisco Tapia

De cara a las altas tem­peraturas que se han estado experimentando las últimas semanas en la metrópoli, médicos veterinarios llama­ron a la ciudadanía a tomar las respectivas precauciones para proteger a los animales pequeños y sus mascotas.

El diputado local del PAN, Abel Hernández Már­quez, convocó a rueda de prensa para, junto con ex­pertos, emitir una serie de recomendaciones en favor de mascotas ante las reper­cusiones del cambio climá­tico, ya que contrario a lo que se podría pensar, los golpes de calor pueden lle­gar a matar a todos estos animales pequeños.

“Queremos hablar de un tema importante que está aconteciendo ante las pre­sentes ondas de calor y las excesivas temperaturas atí­picas que estamos viviendo, porque hay una preocupación en muchas familias sobre el trato y los cuidados que hay que tener en las pequeñas es­pecies y en las mascotas do­mésticas. Queremos prevenir, de la mano de los expertos, sobre qué se podría hacer con el tema de las mascotas, con los animales pequeños, con los caballos”.

El médico Juan Ibáñez Arróniz expresó que el famo­so golpe de calor es de lo que más preocupa para los que se encargan de atender a anima­les pequeños, ya que cada vez es más común ver la muerte de pacientes, de ahí la necesi­dad de concientizar sobre esta situación.

“Un golpe de calor real­mente es una condición que puede originar la muerte del paciente y romper el mito que únicamente es un aumento en la temperatura corporal y que lo que podríamos revertir ba­jando la temperatura, no, hay que crear conciencia a las personas de las necesidades nuevas, de las necesidades actuales que tenemos para el cuidado de las mascotas”.

Recordó que antes se tenía la creencia de que los perros con cierta condición genética eran los que podían resentir un golpe de calor, es decir, aquellos de cabeza ancha y hocico corto, ya que tienen problemas de termorregula­ción. No obstante, aclaró que ahora se sabe que esto no es así, que las altas temperatu­ras pueden afectar a cualquier canino.

“Los perros manejan una temperatura corporal fisioló­gica de manera normal entre 38.5 y 39 grados centígrados y nosotros los humanos la te­nemos de 37. Pero nosotros los humanos tenemos la par­ticularidad de que transpira­mos y los perros la única for­ma de sudar la tienen por las patitas, porque el resto de su cuerpo no tiene glándulas”, añadió por su parte el médico Mario López.

Por ello, expertos llama­ron a los tapatíos a dejar de confundir la dignificación de los animales con su humani­zación y sobre protección, pues en la mayoría de los ca­sos -por desinformación- las especies reciben cuidados que resultan contraproducentes.